Es indudable que las nuevas tecnologías han provocado una profunda y vertiginosa transformación en la sociedad al permitir la rápida difusión y acceso a la información y el pensamiento. Pero también es innegable que comienzan a crear problemas. Usuarios enganchados a la Red, móvil-dependientes o adictos a los videojuegos.
El abuso de estos instrumentos crea adicciones muy similares a las de las drogas, así lo advierten los expertos. Jóvenes y niños son los colectivos más vulnerables. Muchos no imaginan su vida sin el teléfono móvil, el pc del dormitorio o la PSP. Aunque, sin los dos primeros, la mayoría de los adultos posiblemente tampoco.
Cuando el individuo va cediendo horas que antes dedicaba a otras actividades (amigos, trabajo, etc.) a Internet, a reventar la factura del móvil o a echar una partidilla, comienzan los problemas. El enganche es díficilmente detectable por los padres. Y la brecha digital entre generaciones tiene mucha de la culpa.
El mono de tecnología existe, aunque los especialistas recomiendan que la solución no es la abstinencia total, sino la reeducación en el uso de estas herramientas. Cabe cuestionarse si esta adicción psicológica no es más que la cola de un problema más profundo, como la timidez, las dificultades de los jóvenes para socializarse o para comunicarse con sus progenitores.
Artículo de opinión: Drogadictos.com
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